TODO EMPIEZA CON LEBRON

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MIAMI -- Hay momentos en los que Erik Spoelstra no reconoce a LeBron James.

Por lo general ocurren en la sala de video, cuando el entrenador del Heat desempolva algunas grabaciones de los días de James en Cleveland. Excepto por el nuevo jersey, James tiene una apariencia similar. La banda en la cabeza, los Nikes y el físico -- todo eso es familiar.
¿Pero su juego?

"Totalmente diferente", dijo Spoelstra. "Se ha transformado completamente como jugador de básquetbol. Y, en el proceso, nos ha transformado por completo a nosotros".

En los videos, Spoelstra ve a un jugador que básicamente jugaba desde afuera hacia adentro, golpeando la roca y tratando de atacar desde el perímetro en jugadas de uno contra uno. Esto es lo que se supone que un alero convencional debe hacer. A James, con un paquete inigualable de manejo de balón, potencia, y velocidad, esto le resultaba fácil. Tenía éxito jugando dentro de los muros de la tradición. Después de todo, ganó dos premios al Jugador Más Valioso de esta manera, y su equipo terminó con el primer sembrado del Este durante dos temporadas consecutivas antes de su agencia libre en el 2010.

Pero para desatar su versatilidad sin límites y ganar ese título esquivo, James tenía que cambiar. Spoelstra también tenía que cambiar. Pero no esto no ocurrió de la noche para la mañana. Cuando James llevó su talento a South Beach, el Miami Heat trató de hacer que se sintiera cómodo en su nuevo entorno y lo rodeó de compañeros familiares y una estrategia conocida.

El presidente del Heat, Pat Riley, trajo a Zydrunas Ilgauskas, quien fue compañero de James durante sus siete temporadas en Cleveland. Miami incorporó a Erick Dampier y fichó a Carlos Arroyo y Mike Bibby. Llenar el roster con bases y centros convencionales fue la ruta segura, pero dio lugar a unas Finales de la NBA inmensamente decepcionantes para James y Spoelstra en el 2011.

A Spoelstra le gustaría volver el tiempo atrás.

"Pensar de manera convencional durante esa primera temporada con LeBron -- ese es mi mayor remordimiento como entrenador", dijo Spoelstra. "Puse a LeBron en una caja. Y eso es lo peor que podría haber hecho".

Fue entonces cuando Spoelstra decidió dejar de lado todas las convenciones.

Sembrar la semilla

Todo empieza con James. Con un talento único en una generación como él, así debe ser.

"LeBron era un alero, eso era lo que sabíamos", dijo Spoelstra. "Así fue como construimos y dirigimos el equipo [en el 2010-11]. Pero luego de la serie con Dallas, decidimos empezar de cero.
"Siempre hablábamos de lo versátil que era nuestro equipo, pero nunca había pensado en lo que eso significaba. Teníamos que acabar con las convenciones".

Para eso, James tenía que abrazar completamente su porte de 6-8 pies y 270 libras -- y usarlo en el poste. James ya había contribuido a la causa de Spoelstra al entrenar con Hakeem Olajuwon durante el cierre patronal y perfeccionar su arte en el bloque por primera vez en su carrera. Según Synergy Sports, James tuvo 3.6 jugadas de posteo por partido durante la temporada regular 2011-12, duplicando su uso allí con respecto a su última campaña en Cleveland. Este índice aumentó a 4.5 posteos en los playoffs, cuando James se vio obligado a jugar como ala-pivote en lugar del lesionado Chris Bosh.

Aunque tal vez haya parecido que fue la primera vez que James se consideró como un N° 4, la semilla se había sembrado meses antes. La idea surgió en marzo, cuando Bosh dejó el equipo por varios partidos debido a una muerte en la familia. Spoelstra se sentó con James en Portland durante el almuerzo y le dio las órdenes.

"Necesitamos que juegues como un grandote", Spoelstra recuerda haberle dicho a James. "Olvídate de todo lo que sabes; ahora eres un 4".

En el siguiente partido del Heat, James marcó al centro Marcus Camby, de 6-11 pies, y terminó con 38 puntos, 11 rebotes, 6 asistencias, 5 robos y cero pérdidas de balón en una victoria por 107-93 sobre los Trail Blazers. Fue la primera vez desde que se empezaron a registrar las pérdidas de balón en 1977-78 que alguien tuvo un partido con al menos 35 puntos, 10 rebotes, 5 asistencias, 5 robos y cero pérdidas de balón.
No hace falta aclarar que James recibió el mensaje.
Y no fue una excepción. James fue un monstruo estadístico cuando jugó de 4 durante la temporada de campeonato del Heat en el 2011-12. Registró el mejor índice de eficiencia (PER) de la NBA con un 30.8 la temporada pasada, pero cuando jugó de 4, esta cifra se disparó a un asombroso índice de 37.1, según 82games.com. ¿Prefieres numeritos más tradicionales? James promedió 39 puntos, 12.5 rebotes y 8.1 asistencias cada 48 minutos jugando de 4, alrededor de una cuarta parte de sus minutos totales.

Y todo esto lo hizo antes de los playoffs.

Unos cuatro meses después de aquel almuerzo en Portland, James produjo un triple-doble en el Juego 5 que dio lugar a su primer festejo de campeonato. Con el éxito de James como grandote, y un título para demostrarlo, la visión de Spoelstra para el 2012-13 estaba en su lugar.

Sin embargo, aunque todo comienza con James, no funciona sin Shane Battier.

El único igual de James

A simple vista no tenía sentido. Luego de ser castigado en la pintura durante las Finales de la NBA en el 2011, el Heat decidió fichar a Battier, en aquel entonces un ala de 33 años con poco atletismo y habilidades ofensivas limitadas. De todos los jugadores, ¿porqué él? Sin embargo, resultó que Battier era justo lo que el Heat necesitaba para maximizar el talento de James.

"En términos de inteligencia de básquetbol, Shane era el hombre perfecto para LeBron", dijo Spoelstra. "Nunca había dirigido a dos jugadores con semejante inteligencia de básquetbol, y mucho menos en el mismo equipo".

Tomemos como ejemplo la primera ronda de la postemporada contra los Knicks. Sentado frente a su casillero antes del duelo contra los New York Knicks de Carmelo Anthony, Battier estudiaba minuciosamente un paquete de datos que explicaban cómo aprovechar las tendencias de Anthony. James entró en los vestidores, vio a Battier estudiando los informes, y se sentó junto a él para obtener más información.

Ahí mismo, Battier le mostró a James en blanco y negro cómo había que dejar que Anthony lanzara sus tiros en salto de 20 pies, sin importar lo bueno que fuera, ya que perjudicaban a los Knicks por ser una jugada ineficiente. Battier hablaba como un fanático acreditado de las estadísticas, usando términos como puntos por posesión, eficiencia y valor marginal. James lo tragó todo. Y así fue como el actual JMV se convirtió en un estudiante de la analítica.

"Las personas subestiman mucho la inteligencia de básquetbol de LeBron", dijo Battier. "Hay muchos hombres que son capaces de pensar en el juego, pero no pueden mover las piernas lo suficientemente rápido como para hacer lo que les dice su cerebro. LeBron une todo, y eso es lo que hacen los grandes. Kobe Bryant, Tim Duncan, Kevin Garnett, todos lo hacen".

En la cancha, Battier le permite a James alcanzar su potencial como grandote. Con 6-8 pies y 220 libras, Battier defendió a jugadores de la talla de David West, Kendrick Perkins y Serge Ibaka en los playoffs para que James pudiera explotar marcas más favorables en el otro extremo. El Heat no tenía un ala-pivote que pudiera abrir la cancha con triples confiables, por lo que reclutaron a Battier para cubrir este rol.

"Es un desafío increíble para mí a los 34 años", dijo Battier. "No es que esté aburrido del deporte, pero aprender a marcar una posición totalmente nueva es divertido. No soy un ala-pivote, pero tengo que marcar a los ala-pivotes. Quiero decir, estoy marcando a Blake Griffin ahí afuera".

Sin posiciones y sin límites

Se supone que Battier no debe decir las palabras "ala-pivote". Lo mismo va para el resto de los jugadores del Heat. Spoelstra ha afectado el uso de las etiquetas convencionales de posición en el vocabulario del equipo. Lo que comenzó como "ritmo y espacio" la temporada pasada, se ha convertido en lo que Spoelstra ahora llama "básquetbol sin posiciones".

Pero Spoelstra insiste en que no está tratando de iniciar una revolución.

"No estamos tratando de crear un eslogan, ni de empezar algo en la liga, ni de ser innovadores con esto", dijo Spoelstra. "Simplemente fue algo para que nuestros hombres, nuestro personal, y hasta yo mismo, pudiéramos apreciar la fortaleza de nuestro equipo".

La idea es simple: Las etiquetas tradicionales no se aplican a la plantilla del Heat así que no jugarán de esa manera. Si el Heat tuviera a Dwight Howard o a Chris Paul, las cosas podrían ser diferentes. Pero utilizan una flota de camaleones en James, Battier, Dwyane Wade y Bosh, más Ray Allen y Mike Miller.

"Toda la versatilidad que tenemos en nuestro equipo permite que Spoelstra diga eso", dijo James sobre el básquetbol sin posiciones. "Si tuviéramos hombres convencionales, no podríamos tener un equipo sin posiciones. Tenemos manejadores de balón; tenemos hombres que fijan pantallas, que se postean y disparan. Los muchachos conocen sus roles. Simplemente es el equipo que tenemos".

Spoelstra ya no utiliza posiciones para designar a sus jugadores. En cambio, utiliza las iniciales de los nombres de los jugadores en sus diagramas y asigna los jugadores a cinco puntos de la cancha para sus esquemas: un solo hombre en el poste, dos en las esquinas y dos en las alas.

Esta pretemporada en las prácticas, el Heat ejecutará sus esquemas una y otra vez antes de que Spoelstra grite "cambien", y los jugadores jueguen su propia versión de las sillas musicales, rotando de un lugar a otro. Wade reemplaza a Bosh en el poste, y Bosh pasa a la punta de la llave, adonde puede enfrentarse a los centros contrarios desde el drible. Battier se mueve a la esquina, y Allen pasa al ala.

Cambio nuevamente. James pasa al bloque y Wade a la esquina, para cortar hacia el aro. Bosh se mueve a la esquina, donde ha desarrollado un agudo tiro de 3 puntos. Una y otra vez.

Manejadores del balón. Posteadores. Pantalleros. Lanzadores perimetrales. Cortadores. Todas las partes son intercambiables.

"Tenemos que mirar a este equipo con un lente diferente", dijo Spoelstra. "Cuando tratamos de pensar de manera convencional y poner a los muchachos en ciertas casillas o posiciones, realmente nos limita mucho. No sólo en términos de ritmo, mentalmente también. Hemos desarrollado este término [sin posiciones] sólo para que los hombres comprendan nuestra versatilidad y cómo debemos jugar".

Los jugadores ya se están contagiando. Luego de la victoria de pretemporada sobre Detroit, un reportero le preguntó a Bosh si ahora es un "base/centro" por haber pasado de costa a costa para una canasta en el juego.

"No", respondió Bosh. "Sólo un jugador. Todos llenarán los espacios en blanco cuando todo esté dicho y hecho".

Con cinco puntos de rotación en la cancha, el Heat ha hecho algo estratégico en el campo de juego, pero también podría tener un efecto liberador. Sin etiquetas, James no tendrá que cumplir con las nociones preestablecidas.

Durante toda su carrera, James ha sido comparado incesantemente con los más grandes de todos los tiempos, porque es la naturaleza humana mirar el pasado para interpretar el presente. Se decía que James iba a ser el próximo Michael Jordan, luego se convirtió en el próximo Oscar Robertson, o tal vez en el próximo Magic Johnson. Más tarde se convirtió en un base/alero, un Karl Malone con habilidades de pase de John Stockton.

En un básquetbol sin posiciones, el Heat ha terminado con todo esto. Por primera vez en la carrera de James, el libro de jugadas y su equipo son un reflejo de su propia versatilidad.

Y ahora, LeBron James podrá ser simplemente LeBron James.

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