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Definimos el 'clutch-time' a los últimos cinco minutos del último cuarto o tiempo extra, cuando el margen de diferencia entre dos equipos es de cinco puntos o menos.
Es el momento en el que la mano tiembla. Es increíble cómo uno se puede olvidar de un día para el otro lo que pasó hace sólo algunos meses. La mente del ser humano es tan compleja que recuerda sólo lo que quiere recordar.
En la era de Michael Jordan, todo pasaba por medir los últimos tiros. Y en ese apartado, el 9-18 en tiros para pasar al frente en los últimos 24 segundos de último cuarto o tiempo extra, está tan por encima del que viene después que sería una completa tontería tratar de poner algo en el otro platillo de la balanza para tener una segunda percepción.
LeBron James es sin duda el jugador más dominante de la NBA en los últimos tiempos. No es casualidad que haya sido elegido tres veces como Jugador Más Valioso de la competencia -incluso consiguió algo que muy pocos lograron, ser el MVP con dos franquicias diferentes- pero en materia de 'clutch-time' sigue estando en el ojo de la tormenta.
Antes de tomar su caso de análisis, hay que ser justos con él. Erra mucho pero intenta también demasiado. También llega desgastado al cierre de los juegos. ¿Excusa? No, en absoluto. Saber manejar la presión y tomar las determinaciones adecuadas es parte de rol de la estrella.
El martes por la noche, James volvió a fallar en el momento en el que se lo necesitaba. Esos dos tiros libres malogrados cuando el juego ante los Pacers era de una posesión, obliga a mirar hacia atrás y ver qué está pasando con el Heat y con los jugadores estrella.
Según nos comunica ESPN Stats, en sólo esta temporada, James lleva un porcentaje triste de tiros libres en el último minuto de los juegos de una posesión (58.8%). El resto del equipo, combinado, tiene 13-15 (Dwyane Wade 6-7, Chris Bosh 3-3 y Mario Chalmers 4-5. LeBron lleva 10-17).
En el último cuarto de acción, LeBron tuvo 4-8 en TL y ejecutó su último lanzamiento -un triple errado- con 3.35 por jugar en el período definitorio. Sólo James y sus fantasmas saben qué cruza por la cabeza en ese momento.
Ahora bien, el problema del Heat es mayor, porque hay que ser justos con LeBron. Wade tuvo la chance de empatar en el cierre y erró un tiro que, para él, es fácil. Entonces, ¿qué pasa con Dwyane? En las últimas dos temporadas, incluyendo playoffs, tiene un 4-13 de campo en tiros para ganar o empatar en los 24 segundos finales. Chalmers, quien también tuvo la oportunidad de tomar un lanzamiento de estas características, lleva 1-8.
Sí, claro, me falta LeBron en tiros de estas características. En las últimas dos temporadas, hizo... ¡2-12!
Olvidemos por un momento el caso del Heat y veamos algunas variables de equipo en el 'clutch-time'. Hablemos de Los Angeles Lakers. ¿A quién le darían el último tiro? Por favor, levanten bien alto la mano los que no dijeron Kobe Bryant.
Miremos lo siguiente:
Los Lakers tienen el mejor +/- de la temporada en el 'clutch time' (+79), seguidos por los Pacers (+65). Ahora bien, ¿quién es el mejor jugador de la Liga en +/- en este espacio de tiempo? Pau Gasol.
El ala-pivote catalán domina la Liga con +90, lo que indica que si tienes que jugar el último balón, ya sabes quién debe ser el destinatario. No sólo eso: en los Lakers, el segundo mejor es Andrew Bynum (+74). Kobe rankea con... +70. Otro dato más para comprender que esta versión de los Lakers está potenciada por sus gigantes.
Tres de los cuatro mejores jugadores de la Liga pertenecen a L.A. en este apartado. Gasol es el 1°, Bynum el 2° y Kobe el 4°. El tercero mejor es, sorprendentemente, Jeff Teague, con un +/- de +74.
Los Angeles Clippers (-9) son el único equipo de playoffs con un +/- negativo.
Y pese a lo que se sabe de James, los Cavaliers lideraron la Liga en 'clutch time' por tres años consecutivos (2007-08 a 2009-10), pero una vez que James se fue de los Cavaliers a Miami, el +/- se desplomo: pasó de +119 a +1.
A mediados de abril, Tom Haberstroh dio a conocer en uno de sus escritos de ESPN la lista de jugadores más sobresalientes en el clutch-time, con estadísticas gentileza de NBA.com:
Hacerse cargo en el clutch-time
El mayor crecimiento en usage rate en situaciones de clutch time comparado con el usage rate total (mínimo 50 minutos de clutch)Jugador | TC% | Clutch TC% | USG% | Clutch USG% | Dif% |
---|---|---|---|---|---|
Kyrie Irving | .468 | .544 (31-57) | 27.9 | 47.2 | +19.3 |
Carmelo Anthony | .425 | .365 (31-85) | 31.2 | 47.2 | +16.0 |
Chris Paul | .484 | .449 (40-89) | 23.7 | 35.5 | +11.8 |
Jarrett Jack | .456 | .431 (22-51) | 23.0 | 34.7 | +11.6 |
Kevin Durant | .503 | .406 (43-106) | 30.5 | 41.5 | +10.9 |
Kyle Lowry | .417 | .357 (15-42) | 21.7 | 31.4 | +9.7 |
John Wall | .422 | .211 (8-38) | 24.6 | 33.8 | +9.1 |
Monta Ellis | .434 | .452 (28-62) | 28.5 | 36.7 | +8.2 |
Derrick Rose | .436 | .292 (14-48) | 30.5 | 38.5 | +8.1 |
D.J. Augustin | .376 | .393 (11-28) | 20.5 | 27.3 | +6.8 |
Empecemos explicando qué es el usage rate. Se trata de la cantidad de posesiones que tiene un jugador mientras está en cancha. Es una estadística fundamental para entender qué protagonismo tiene ese hombre en la ofensiva del equipo.
¿Dónde está LeBron? ¿Y Wade? ¿Y Kobe? Ouch. A veces duele ver la realidad tan de cerca. La mirada de asesino es algo que hay que empezar a delinear de cerca: alguien, aquí, nos está engañando.
Ahora bien, otra tabla para seguir de cerca, publicada a mediados de abril por Tom Haberstroh, que muestra el decrecimiento de los jugadores, de principio a fin de juego.
Sólo quedan en competencia Harden (Thunder) y Martin (Clippers). La baja de Harden tiene una razón de ser: el crecimiento de Durant en el momento decisivo de los juegos empuja a Harden, sexto hombre, a tomar un rol menos protagónico.
Llama la atención que Dwight Howard ni siquiera esté considerado en las posiciones.
Nadie plantea el básquetbol de héroes como una solución. Lo que importa es siempre el equipo. Pero sirve saber qué jugadores dan la cara en el momento decisivo y qué jugadores fallan. Las razones son varias en las estadísticas, porque el crecimiento de uno empuja a otro hacia el fondo. De todos modos, hay algo que vale como conclusión: el talento, muchas veces, no va de la mano con los cierres. Cuando la mano tiembla, empiezan a jugar otros factores, mentales en su mayoría.
Esto es sólo una mirada a vuelo de águila. La punta del ovillo. Sin dudas, tendremos mucho más para ver.
Desde aquí, seguiremos buscando datos que nos ayuden a sacar conclusiones.
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Bruno Altieri/ESPNDEPORTES.COM
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