Eso indica que, si de aquí al 30 las partes no se ponen de acuerdo en un nuevo pacto será decretado un cierre patronal similar al acontecido en 1998.
Y como van las cosas parece que es inminente que se vuelva a repetir el desagradable capítulo.
Las diferencias conceptuales en la negociación son amplias, sobre todo en lo que tiene que ver con la forma de compartir los ingresos y cómo y dónde discutir el asunto.
Por un lado, los propietarios sugieren firmar primero un nuevo convenio y luego discutir la forma de distribuir las ganancias.
De su parte, los jugadores quieren que la manera de repartir los ingresos sea incluída en el pacto laboral.
La temporada pasada, los jugadores devengaron un total de 2,100 millones de dólares en salario, cifra que los dueños quieren disminuir en 500 millones en los próximos cinco años, según su última propuesta.
La NBA alega que las pérdidas para los equipos en la pasada temporada serán por el orden de los 300 millones de dólares - número que los jugadores creen es más baja- y que 22 de los 30 equipos terminarán en números rojos.
La unión de jugadores considera que esa distorsión se puede solucionar si los equipos que ganan dinero ayudan a los que no lo hacen. Además se oponen a la implementación de un tope salarial fijo o a que se revise la duración de los contratos.
Mientras los equipos de la NBA comparten dinero de los contratos de televisión a nivel de Estados Unidos y los fondos recolectados de equipos que exceden el impuesto de lujo, la NFL comparte cerca del 80 por ciento de todos los acuerdos con medios de comunicación, patrocinadores nacionales y venta de mercancías, además del 34 por ciento de la ventaja de boletas luego que el equipo local ha obtenido el 66 por ciento.
Ambas partes parecen estar muy alejadas de ponerse de acuerdo por lo que todo luce indicar que se producirá el cierre patronal o “lockout”. Y si para mediados del próximo mes de enero no se logra un pacto, la temporada sería definitivamente suspendida.
FASTBREAKS.- John Calipari, el entrenador titular de la selección nacional, acaba de recibir una extensión de su contrato con la universidad de Kentucky por dos años más, hasta la campaña de 2018-2019 por un valor de 36.5 millones de dólares.
Calipari tendrá 60 años cuando culmine el convenido y ha dicho que no le interesa estar dirigiendo más allá de esa edad. El contrato anterior, por ocho años y 31.65 millones expiraba en 2017. Se espera que esto no afecte su relación con el equipo dominicano que estará en el Torneo Preolímpico en Mar del Plata, Argentina en este verano.
LISTIN DIARIO
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