DEL DIRECTORIO: UN AÑO MAS.....MAS SUEÑOS ROTOS

Un año más, una vez más, sí, se repite el mismo cuadro, la misma historia de siempre, con los Mercedes o los ingenieros, La Romana tiene que sufrir para clasificar, para obtener logros en el ámbito del deporte que más ama: el baloncesto.

En este caso no es la excepción, ayer fue por problemas de inversión, ayer fue porque no había incentivo económico para los jugadores y eso afectaba la motivación, hoy es por los egos personales, por el yo interno, uno de los pecados capitales, y podría atreverme a decir que hasta por envidia, entre ellos mismos, sí entre los jugadores.

Y es que otra explicación no se puede dar, a un equipo que tiene todo el talento, pero de repente se vuelve rebelde, se convierte en el dios de las estupideces, en la fachada misma de la imprudencia constante, es que nadie, nadie está dispuesto a ceder protagonismo, principalmente de aquellos que juegan en la parte baja de la cancha, es que han tenido todos los chances y no los han aprovechado, pero ahora quieren terminar promediando 20 puntos todos y cada uno de ellos.

Si es cierto fanáticos, no se sorprendan……………… no se sorprendan ante la verdad, todos nosotros lo vemos, lo sabemos, que ninguno está dispuesto a sacrificarse por obtener victorias, ahora no hay excusas, sabemos que su dinero se lo han pagado, entonces porque estos malos resultados, amén de uno que otro error en la parte técnica, no se explica como un equipo de ese nivel y categoría no es capaz de dar el máximo, se les noto el miércoles pasado salir a la cancha, fríos, sin corazón y sin alma ante más de dos mil personas en el polideportivo, se les vio perder una ventaja de 11 puntos muy fácil, y como pusilánimes inútiles no reaccionaron, y todos los parroquianos tuvieron que quedarse calladitos, sentaditos y tranquilitos, atónitos ante esta realidad que tenían en frente, que Los Cañeros, sí, los Cañeros son un equipo de egoístas, de gente que busca lo suyo, jugadores que piensan en ellos nada mas, no piensan en todos los fanáticos que los idolatran.

Y luego van ante un equipo ya perdido, completando calendario y no son capaces de tenerlas todas consigo, no tienen la dignidad de ganarle, mas aun parecía que los que estaban peleando por el primer lugar eran los rojos, porque los mameyes seguían jugando a:
¿Quién es el mejor?.


Tanto, pero tanto lo lamento por los romanenses, que están acostumbrados a perder de la misma manera, ay!! pobre del dirigente, ese que si quiere ganar, que tiene el deseo, pero que lamentablemente no juega, solo dirige una partida de personas que no merecen tener ese privilegio de jugar a este nivel, o por lo menos no de representar a La Romana, a menos que, y lo dudo mucho, aprendan a ser desprendidos, a pensar en el dolor de los romanenses, que pagan sus boletas para ver a su equipo, no verlos ganar, pero si a dar el todo por el todo por ellos, lo cual así no ha sido.

Siento mucho si hiero los sentimientos de alguien, pero aquí estamos para decir la verdad, si les sirve de algo por lo menos reflexiónenlo y operen un cambio de actitud, en agradecimiento al esfuerzo tanto de los directivos por pagarles a ustedes sus salarios, como por los fanáticos que pagan religiosamente su dinero para irlos a ver, aunque ustedes no lo merezcan.

Y al que le sirva el sombrero........................... ni modo......... que se lo ponga.

Pero La Romana seguirá diciendo ¡vamos cañeros! (aunque muy adentro sepa que el amor por ellos no es correspondido por los jugadores que no piensan más que en sí mismos y no en los seguidores fieles que tienen)